Que el ejercicio físico es saludable es una parte del conocimiento fundamental que todos tenemos. Sin embargo, si alguien nos preguntase para qué sirve exactamente no sabríamos qué decir. Todavía se desconoce la relación entre los diferentes tipos de ejercicio (más ligero, más intenso, aeróbico o anaeróbico) y la mejora en la condición física. En un reciente estudio sobre la actividad física se descubrió que el ejercicio intenso es hasta tres veces más efectivo para mejorar la condición física que simplemente caminar y hasta 14 veces más efectivo que reducir la inactividad diaria (como subir escaleras en lugar del ascensor, etc.). La conclusión es que podemos compensar un estilo de vida sedentario siempre que realicemos regularmente sesiones de ejercicio de alta intensidad.
Así que aquí van cinco buenas razones para practicarlo:
-
- El ejercicio físico no sólo mejora nuestro tono muscular sino también la salud mental, pues es muy útil para combatir afecciones como la depresión o la ansiedad. Personas sedentarias que las sufren notan rápidamente los beneficios del ejercicio en su estado anímico cuando empiezan a practicarlo.
- Además de mejorar el estado de ánimo, el ejercicio físico aumenta la autoestima y la confianza en uno mismo.
- Practicar regularmente alguna actividad física ayuda a ciertas enfermedades, como dolencias cardiovasculares, cáncer, hipertensión, diabetes, obesidad y osteoporosis.
- También alarga el tiempo del sueño y mejora su calidad, reduciendo el insomnio.
- Ayuda a conseguir una salud más fuerte, así como un mejor tono físico, es decir, un peso saludable y un cuerpo ágil.