La mitad de la población adulta en España tiene el colesterol más alto de lo deseado (200mg/dl) y de ellos sólo el 20-25% está recibiendo el tratamiento adecuado. Esto en parte es debido a que la mitad de los hipercolesterolémicos desconoce serlo y en otra parte a que muchos médicos no informan al paciente hasta que este supera el antiguo punto de corte situado en 240 mg/dl.

Las guías actuales y las principales sociedades científicas implicadas en la prevención cardiovascular recomiendan mantener el colesterol por debajo de 200 mg/dl ¿Pero por qué 200? ¿Es un valor arbitrario o está basado en algo? Efectivamente esta cifra está basada en la evidencia disponible hasta la fecha y especialemente en las tablas de Framingham, SCORE y sucesivas revisiones y adaptaciones. Todo es cuestión de estadística: tener el colesterol por encima de 240 mg/dl duplica el riesgo de sufrir un infarto, pero este riesgo no empieza sólo a partir de 240 mg/dl, si no que a partir de 200 ya podemos observar estadísticamente un aumento del riesgo cardiovascular. Una cifra por debajo de 240 mg/dl podría ser aceptable en adultos sanos sin otro factores de riesgo añadidos, pero si el paciente es hipertenso, diabético, obeso, fumador, padece diabetes o simplemente supera cierta edad, el riesgo de enfermedad cardiovascular aumenta ya con cifras mayores de 200 mg/dl como puede observarse en las tablas.

Terapias hipolimepiantes:

1.- Dieta y ejercicio: la primera medida que debería adoptarse es una dieta baja en colesterol (ver recomendaciones dietéticas) y aumentar la actividad física. Lamentablemente esto tiene sus limitaciones y sólo es eficaz en personas con ligeras alteraciones ya que la mayor parte del colesterol es sintetizado por el propio organismo y sólo un 15-20% procede de la dieta. Aún eliminando por completo el colesterol de la dieta habría algunas personas que no conseguirían alcanzar las cifras objetivo.

2.- Fármacos: existen multitud de fármacos para reducir el colesterol que actúan en diferentes fases de su metabolismo. Los más empleados hoy en día son las estatinas que bloquean la producción endógena de colesterol logrando grandes reducciones. En general son bien tolerados aún que a veces hay problemas de alteraciones hepáticas o daño muscular que obligan a suspender el tratamiento.

3.- Tratamientos naturales: en los últimos tiempos han proliferado multitud de remedios naturales que supuestamente reducen el colesterol, como veremos a continuación esto no siempre es cierto.

a) Omega 3: se dice con frecuencia que los ácidos grasos omega 3 son buenos para el colesterol, pero lo cierto es que el consumo de suplementos de omega 3 no reduce las cifras de colesterol total, ni siquiera empleando grandes dosis. Sí que disminuyen las cifras de triglicéridos y se sabe que su consumo regular es positivo para disminuir el riesgo cardiovascular.

b) Lecitina de soja: a pesar de ser uno de los remedios más populares contra el colesterol está totalmente demostrado que no reduce el colesterol ni ningún otro lípido plasmático como ya advirtió al Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (ver nota de la EFSA). Sin embargo esto no significa que su consumo no sea saludable, se cree que su contenido en fosfolípidos puede impedir que el exceso de colesterol en sangre se deposite sobre las paredes arteriales (efecto preventivo), pero esto tan poco ha podido ser demostrado.

¿Qué te recomendamos nosotros?

Si tienes el colesterol alto, pero no lo suficiente como para requerir un tratamiento farmacológico, o si bien no toleras los medicamentos que te recetó tu médico, la combinación de dieta hipolipemiante junto con Armolipid Plus es una alternativa segura y que ha demostrado sobradamente su eficacia. Armolipid Plus es un nutracéutico compuesto por levadura roja, berberina, policosanoles, ácido fólico y antioxidantes; efectivo en el tratamiento de la hipercolesterolemia, hipertrigliceridemia y en la prevención de enfermedad coronaria ya que promueve un marcado descenso del riesgo cardiovascular. Estudios clínicos controlados (ver estudio) han demostrado que la administración de un comprimido al día de Armolipid Plus puede conseguir reducciones de hasta un 20% del colesterol total, así como disminuciones significativas en el colesterol LDL («colesterol malo») y en los triglicéridos.

En Farmacia Alonso Luengo estamos tan satisfechos y seguros de este producto que regularmente ofrecemos a los pacientes que lo usan la posibilidad de hacer controles gratuitos de colesterol en la farmacia para comprobar la eficacia del tratamiento. Hasta ahora la gran mayoría de pacientes están satisfechos con el producto y con el servicio al ver como sus cifras de colesterol se van reduciendo mes a mes.